"LA GENTE SENCILLA."

Hoy escuché a un periodista, no recuerdo el nombre, dando una definición muy interesante: "la gente sencilla es la que participa con entusiasmo de cualquier acontecimiento, sin cuestionamiento alguno". 

Qué particular que es la Argentina, sus medios, su gente y la dinámica de la información. Hace una semana oficialistas de la primera hora, opositores, vilmaripolistas y juventudes nazis lloraban por igual la muerte de Chavez. De golpe el caudillo caribeño era el próximo Che Guevara.

Y digo que es particular, porque de la izquierdísima ahora volcamos para la derecha más rancia: aguanten los prelados, San Lorenzo, la Santísima Trinidad y la serie televisiva The Borgias. Todos lo conocieron, todos vivieron en su barrio, y de golpe las sospechas por colaboracionismo en la dictadura cívico-militar, el robo de bebés, los dos sacerdotes entregados, son "rumores infundados" nunca probados (ni investigados) por la justicia. En definitiva, un aguante todo. Oficialistas, opositories, progresistas y liberales se suman a la fiesta por igual.

Hasta acá ninguna sorpresa, somos un pueblo exitista y los medios no hacen más que alimentar ese sentimiento hablando 24/7 del mismo tema. El oportunismo político tampoco es ninguna novedad.

El problema arranca un minuto después, cuando el mismo periodista dice "lo que pasará mañana es el acontecimiento más importante de la historia argentina, más que la Revolución de Mayo de 1810." Esta desafortunadísima reflexión la escuché, con distintos grados de ridiculez, en otros medios a lo largo de la tarde.

Que mañana por la mañana la educación pública se paralice por un evento que, si bien histórico, no nos representa a todos los argentinos, es algo que no me concierne directamente porque ya no voy a la escuela. ¿Debe afectar a niños de otras y ninguna religión, que bien pueden ver este evento dentro del salón de clase, con un docente que les explique lo que sucede, o bien en youtube cuando lleguen a sus casas? Para mí no, ya que la Constitución dice que el Estado es laico, pero algunas personas me señalan "es que la religión oficial del país es la católica". Oiga, un momento: por qué un país debe tener una religión oficial? A quién beneficia? Cierto, al credo en cuestión, cuyos representantes reciben sus correspondientes subsidios por parte del Estado. Entonces "Estado laico" no significa necesariamente que el Estado esté separado de la religión. Crap.

No pretendo ofender a nadie, pero yo me siento muy triste cuando un comunicador se excita diciendo que la asunción de un prelado argentino como Jefe de Estado del Vaticano es el evento más trascendente en la historia de nuestro país. En la Revolución de Mayo nos unimos como pueblo, luchamos por dejar de ser una colonia y conquistamos derechos y libertades. Hasta donde lo veo yo, la iglesia católica está un poco en la vereda de enfrente, tratando de limitar las libertades individuales. 200 años después.

A su vez pienso en todas aquellas personas que son sistemáticamente insultadas por dicha institución. Homosexuales. Divorciados. Romina Tejerina. La amiga de mi mamá, que tuvo mellizos por fertilización asistida.

Absolutamente todo es historia. Todo es cultura. Pero tratemos de parar un segundo la pelota y pensar qué es lo que realmente nos enorgullece como colectivo, como país. Pensar de manera compleja. Por oposición a "sencilla".